Se fue un nuevo aniversario de Mayo, y el actual gobierno muestra más grietas que ideas para evitar una fractura más grande de la que ya tiene, con la pobreza y la inflación -no importa el orden, van de la mano- como un defecto difícil de modificar para esa gestión: no hay pandemia pero sobran billetes con poco poder de fuego. Hay mayor consumo y por ende algo más de demanda laboral, pero de escaso nivel, porque la mano de obra calificada emigra o trabaja en blue, lease, exporta servicios sin pasar un sólo dólar por el Banco Central.
La pata kirchnerista del proyecto, es decir los funcionarios que responden a Cristina, insultan en público al presidente. No hay antecedentes de semejante falta de respeto, vulgar, dañina y con cero códigos para un gobierno al cual llegaron juntos. La fractura ya está expuesta y no hay vuelta atrás. El Gobierno va absolutamente a la deriva, sin compás ni gps.
El sector que responde a Sergio Massa trata de arbitrar y a su vez apoya a AF, sin romper con los incendiarios K. Toda una rareza.
Juntos por más Cambio (según la nueva idea de Macri de más cambio y menos juntos) se debate en mil internas. Jorge Macri va por la Capital, y la pelea, por ahora, sería con Lousteau. En provincia Santilli o Manes, aunque el radical quiere ir por la Rosada. Horacio Rodríguez Larreta espera la bendición de Mauricio, pero el ex presidente tiene más ganas de jugar que de armar. Bullrich se complementa con Javier Milei mejor de lo que lo hace con sus rivales en la interna.
Los alcaldes planean obras para renovar: en Tigre, por caso, Zamora presentó un mega proyecto que incluye un hospital nuevo, dos puentes para reorganizar el atestado crecimiento del tránsito en Nordelta y zona de influencia, dos micro estadios y kilómetros de asfalto, porque sabe que Malena Galmarini no aguantará otro turno y esta vez irá por la intendencia impulsada por su gestión en Aysa y la inevitable cruzada de su marido por Balcarce 50. Posse mira de reojo el mapa provincial pero se apresta a no ser sorprendido en San Isidro, su fortaleza, y prepara una renovación fuerte con mucha obra pública de cara al 23. Es sólo una muestra de lo que viene, con un menú variado, donde la política sigue su circo y la gente hace lo que puede.
Eduardo Abella Nazar
La fractura, el desorden, la mediocridad esta en la mafia que nos gobietna.
Y esperada repito esperada.
No metamos a todos.
Los que gobernaron cuatro años, con errores reconocidos hicieron mucho.
Imposible pensar que lo solucionaroan en escasos cuatro años. La ansiedad espantosa del argentino que desde Paris o Punta del Este, los desmemoriados y los lobbies de siempre hicieron que volvieran los mismos sin analizar con inteligencia y calma que lo que volvia era lo temible.
Entre los corruptos que volvieron y Juntos por el Cambio surgio un loquito impresentable que sabe de economia pero no suficiente para lo que aspira.
Y alli grupetes de seguidores enloquecidos clasico de nosotros.Pareciera que el populismo nos apasiona.
Y.son las ideas y el rumbo los que debe apasionarnos.
Tuvimos una oportunidad, espero por todos los argentinos la volvamos s conseguir.