Desbarataron una banda que vendía drogas y atemorizaba a vecinos en Beccar

Una investigación de tres meses permitió desmantelar una banda que vendía droga en el barrio popular San Cayetano, en la localidad de Beccar, partido de San Isidro. En una serie de allanamientos, detuvieron a los líderes del grupo y sus cómplices e incautaron armas, cocaína, balanzas, teléfonos celulares y dinero en efectivo.

“La seguridad es la principal preocupación de los vecinos y por eso es el eje prioritario de nuestro trabajo. A partir de las denuncias que hicimos desde el Municipio, con información que nos llegó y que presentamos a la Fiscalía, se inició una investigación que culminó con este allanamiento a cargo de la Policía de la Provincia deteniendo a los delincuentes. Este es un ejemplo clave de cómo el trabajo coordinado es crucial para ser implacables contra el delito”, sostuvo el intendente de San Isidro, Ramón Lanús.

La investigación se inició tras una denuncia del Municipio de San Isidro ante la Fiscalía, a partir de un aviso anónimo registrado en septiembre pasado. En consecuencia, tanto la Fiscalía como la Policía Bonaerense llevaron a cabo un trabajo de investigación exhaustivo, en colaboración con la Patrulla Municipal de San Isidro, para identificar a la banda que operaba en viviendas ubicadas en la calle Madame Curie y Udaondo; y en Padre Acevedo entre Mandame Curie e Isabel La Católica, en la villa San Cayetano.

En la estructura de la banda los vendedores eran custodiados por los “soldaditos”, menores de edad que vigilaban los lugares de acopio. Y por encima de ellos se encontraban los “satélites”, como se conoce a aquellas personas que merodeaban y alertaban sobre la presencia de extraños.

Sobre todos ellos estaban «Tobi», «Cari» y “Mayra” los encargados de las ventas. Todos quedaron detenidos en las últimas horas.

Además del arresto de los líderes de la banda, el personal de la departamental de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas de San Isidro secuestraron un arma Bersa TPR9, calibre 9 mm, envoltorios de nylon en los cuales había trozos compactos de cocaína, marihuana, balanzas, celulares y dinero en efectivo